La sociedad civil es un actor social y político que tiene un rol fundamental en la construcción del país que queremos. Es por eso que destacamos los datos relacionados al tercer sector en Chile.
¿Qué entendemos por sociedad civil? Son aquellas entidades privadas, autónomas, voluntarias y sin fines de lucro. Fundaciones y corporaciones, Bomberos de Chile, juntas de vecinos, clubes deportivos, organizaciones que defienden derechos o causas específicas, y agrupaciones de voluntarios entran en esta categoría.
De acuerdo a información del proyecto Sociedad en Acción, iniciativa del Centro de Políticas Públicas UC y Chile+Hoy, apoyada por Fundación Colunga, actualmente existen 234.500 organizaciones de la sociedad civil en Chile. Las áreas temáticas a las que se evocan son: desarrollo social y vivienda (32,1%); cultura y recreación (31,6%); educación e investigación (13,3%); asociaciones gremiales y colegios profesionales (11,5%); servicios sociales (5,4%); salud (1,4%); defensa de derechos y política (2,4%); medioambiente (0,9%) y otros (1,4%).
Diálogos Colunga – sociedad civil
Contribución de la sociedad civil
El mismo proyecto reveló que las organizaciones de la sociedad civil generan 310.000 empleos totales en jornadas completas equivalentes (remunerado + voluntario). Esto equivale al 3,7% de la fuerza laboral del país. Y en términos de gastos, representan el 2,1% del PIB de Chile.
Sus contribuciones más destacadas son las siguientes: Se anticipan al Estado en la solución y visibilización de temáticas de interés público; focalizan sus acciones en grupos en situación de mayor vulnerabilidad; colaboran con el Estado y complementan su trabajo en diversas temáticas; desarrollan acciones innovadoras, pertinentes y fácilmente adaptables; movilizan recursos de diversas fuentes para destinarlos hacia el bien común; aportan con esfuerzos para generar cambios a nivel cultural y de políticas públicas.
Diálogos Colunga – sociedad civil
La reciente Encuesta Nacional de Voluntariado y Solidaridad 2019 de Fundación Trascender y Criteria, destaca que un 88% considera que la sociedad civil organizada debe ser parte del diálogo y la articulación para dar respuesta a las demandas sociales, debido a que están presentes en el territorio y entienden las necesidades de la gente, son entidades que mejor representan a la ciudadanía y tienen mayor credibilidad.
Y en cuanto se produjo el “estallido social” se conformó el #NuevoPactoSocial, una red de redes, donde más de 600 organizaciones de la sociedad civil chilena, que trabajan por construir un país más justo, democrático y sostenible, pusieron a disposición del país su capacidad de articular la confianza y la participación. Una iniciativa de gran valor para conectar a las comunidades con los cambios que necesita Chile.
Foto: Reunión Nuevo Pacto Social en Colunga
¿Cuáles son los desafíos?
De acuerdo al último libro publicado por Sociedad en Acción, “Un nuevo trato para las organizaciones de la sociedad civil. Desafíos y propuestas”, existen dos ejes temáticos que son relevantes para avanzar hacia una nueva concepción de las organizaciones de la sociedad civil: 1) Promover la confianza y fe pública en las organizaciones de la sociedad civil a través de más y mejor información y 2) Mejorar el proceso de transferencia de recursos desde el Estado a las organizaciones. Sólo así se podrá fomentar una relación más horizontal con el Estado y lograr una mayor colaboración en temas de interés público.