Hace 20 años, Naciones Unidas declaró la conmemoración de este día, con el objetivo de avanzar hacia la erradicación de la violencia contra mujeres y niñas en sus diversas formas de agresión, como insultos, abuso, violación y asesinatos, que hasta hace pocas décadas se encontraban invisibilizadas en las sociedades modernas y naturalizadas como formas de control sobre el género femenino, como señala el estudio “Femicidio en Chile” elaborado por la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL).
Sin embargo, los datos continúan siendo alarmantes a nivel global. Según información dada a conocer por Naciones Unidas y recopilada por BBC Mundo, cada día un promedio de 137 mujeres alrededor del mundo mueren a manos de su pareja o de un miembro de su familia, siendo el propio hogar el lugar donde más posibilidades encuentran las mujeres de ser asesinadas.
Por eso, para la Directora Ejecutiva de ComunidadMujer, Alejandra Sepúlveda, esta fecha tiene una gran relevancia, ya que “se reconoce una desigualdad histórica en las relaciones de poder y dominación de los hombres que es ejercida a través de agresión, femicidios, pérdida de dignidad, división sexual del trabajo, brecha salarial de género, feminización de la pobreza, carga de cuidado, exclusión de los espacios de poder y toma de decisiones, desigualdad social, política y económica”.
Para Fundación Niñas Valientes es urgente avanzar en garantizar a las niñas una vida libre de violencia de género, a través de la educación emocional a niñas, niños y adolescentes. Emilia Vergara, Directora Ejecutiva de la fundación, señala la importancia de instalar una discusión nacional en torno al tema, principalmente porque “los casos de violencia hacia las mujeres y femicidios en Chile no han disminuido a lo largo del tiempo”, por lo que pone énfasis en la necesidad de prevenir desde la infancia: “Hay que darle relevancia a formas de violencia simbólica que por tanto tiempo han sido invisibilizadas y que son las que las niñas desde tan pequeñas comienzan a vivir y sufrir”.
En tanto, el proyecto de ley en Chile que busca asegurar el derecho de las mujeres a una vida libre de violencia, fue presentado hace más de dos años, durante enero del 2017, pero continúa en trámites legislativos. Su estado actual de avance corresponde al Segundo Trámite Constitucional en el Senado con urgencia simple.
El proyecto presenta medidas para enfrentar la violencia contra mujeres como un desafío social: “Nuestra legislación necesita tener una mirada más amplia de la violencia contra las mujeres y dejar en evidencia que éste no es un problema entre particulares, sino más bien el reflejo de una estructura social y cultural discriminatoria contra las mujeres”, señala el texto del proyecto.
En tanto, las organizaciones de la sociedad civil continúan trabajando día a día en la prevención y erradicación de la violencia, para alcanzar el profundo anhelo de transformar la realidad en que viven miles de mujeres y niñas.